Uno de los motivos por los que la Quiropráctica es el tratamiento de salud elegido por cada vez más gente es la cantidad de beneficios que aporta. Muchas personas recomiendan la quiropráctica porque, además de ser un metido poco invasivo, despierta la habilidad que tiene nuestro cuerpo de sanarse por sí mismo.

Los beneficios más comunes de la Quiropráctica

Nadie se salva del mal funcionamiento de su sistema nervioso, por lo que cualquiera puede beneficiarse de la Quiropráctica para conseguir aliviar la tensión producida debido a un desalineamiento en su columna, espalda o cuello. Esta disfunción inhabilita en muchos aspectos y limita la capacidad motriz.

Hay algunas ideas erróneas sobre la Quiropráctica, como que sólo sirve para tratar dolores de cabeza o de espalda. Aunque a esta profesión se la conoce inicialmente por ayudar a gente con molestias en estas zonas, a largo plazo los resultados muestran una mejora en la circulación, una reducción de ácido lácteo, una mayor fluidez de oxígeno y nutrientes, más flexibilidad, menos dolores y molestias, reducción de calambres, prevención de lesiones futuras y sentirse más relajado.

Las mujeres embarazadas dan a luz con mucha más facilidad, los bebés pueden mejorar sus habilidades e incluso se puede impedir la aparición de una escoliosis futura. Los niños que están bajo cuidados quiroprácticos tienen menos problemas como: asma, infecciones de oído, por orinarse en la cama, entre otros. Los adultos son capaces de generar mas energía e incrementar su productividad. Los más mayores tienen mejor equilibrio y menos lesiones a raíz de las caídas.

Los resultados, que han afirmado los pacientes que llevan mucho tiempo cuidándose con la Quiropráctica, destacan una mejora en la respiración, la digestión, del sistema nervioso y del sistema inmunitario, y un aumento de vitalidad y de salud en general.

¿Cómo funciona la Quiropráctica?

El sistema nervioso (cerebro, médula espinal y nervios) es el sistema comunicativo de nuestro cuerpo. Si posas la mano sobre una encimera caliente, ésta le enviará a tu cerebro una señal mediante tus nervios y tu médula espinal. Entonces tu cerebro le envía el mensaje de vuelta a tu mano: “¡Muévete!” “¡Quema!”

De la misma manera, se comunica tu cerebro con tu corazón, pulmones, sistema inmunitario y con cada órgano de tu cuerpo. Un sistema de comunicación (nerviosa) que trabaje al 100% es la base para una buena salud.

A veces, este sistema comunicativo se debilita. En casos extremos (parálisis), la médula espinal se daña tanto que el cerebro ya no puede expresarse (0% de comunicación) con una parte de tu cuerpo. Esto traerá muchos inconvenientes a tu salud.

Sin embargo, en la mayoría de los casos la falta de comunicación no es tan severa, pero sigue afectando a tu salud. Tu cuerpo empezará a desmoronarse poco a poco y desarrollará dolor, enfermedades, etc. si la comunicación (nerviosa) de tu cuerpo no está al 100%.

Hay muchos motivos por los que tu cuerpo puede estar débil. Los quiroprácticos se ocupan de una de las causas más frecuentes: el desalineamiento vertebral, también llamado subluxación.

La subluxación

Cualquier trauma (accidente de tráfico, caída, lesión deportiva, estrés emocional, malas posturas, falta de sueño…) somete tu columna a muchísimo estrés, cosa que puede provocar que tus vértebras se muevan. Las subluxaciones vertebrales son las causantes de las interferencias comunicativas de tu sistema nervioso.

Los quiroprácticos son expertos en detectar estos desalineamientos de tu columna. Además, el doctor podrá determinar si la subluxación es la causa de las interferencias de tu sistema nervioso.

En el caso que se encuentre un desalineamiento, el doctor está altamente capacitado para corregir este problema, ayudando que tu cuerpo vuelva por sí mismo a su forma natural.

¿Cuándo se vuelven evidentes los resultados?

Si prosigue con los cuidados quiroprácticos, su cuerpo empezará a realinearse y cualquier presión que pueda causar dolor en sus articulaciones se aliviará. En casos leves, el paciente sentirá cierto alivio justo después del tratamiento quiropráctico. Esto, sin embargo, es una de las ventajas de optar por la Quiropráctica en lugar de elegir procedimientos médicos que requieren un largo período de recuperación.

En otros casos, puede que sienta molestias tras el ajuste quiropráctico. Esto se da porque su cuerpo se tiene que reajustar al realineamiento al que está siendo sometido. Sin embargo, su cuerpo no tardará mucho en adaptarse y volver a su funcionamiento y movilidad normal.

Resumiendo…

Los especialistas en quiropráctica se someten a un entrenamiento extenso para ayudar a sus pacientes de muchas maneras, más allá del tratamiento del dolor cervical o  lumbar. Ellos saben cómo la tensión en la columna vertebral se relaciona con problemas en otras partes del cuerpo y pueden tomar medidas para aliviar esos problemas.

Para obtener más información sobre lo que podemos hacer por ti, llámanos al 606 81 75 91, o ven a vernos a nuestro centro en Vilanova i la Geltrú.