Para prevenir la tendinitis del codo, puede ser útil aumentar la fuerza de los músculos del antebrazo. Calentar y estirar bien los músculos de los brazos antes de cualquier esfuerzo también limita el riesgo de lesiones. Estos ejercicios son preventivos y deben realizarse fuera de los episodios dolorosos.
1. Fortalece tus dedos
Acerca todos los dedos al pulgar para que todos lo toquen. Coloca una banda elástica alrededor de tus cinco dedos. Separa suavemente todos los dedos y ciérralos. Repite veinticinco veces. Haz este ejercicio hasta tres veces al día. Si te resulta demasiado fácil, añada una banda elástica.
2. Estira los flexores de la muñeca
Extiende el brazo frente a ti con la palma de la mano hacia arriba. Utiliza la otra mano para presionar los dedos de la mano del brazo que te duele. Mientras lo haces, dobla la muñeca hacia atrás hasta que sientas el estiramiento en la parte interna del antebrazo. Manten durante quince segundos. Repetir de tres a cinco veces seguidas, hasta tres veces al día.
3. Estira los músculos extensores de la muñeca
Mantén el brazo extendido frente a ti, con la palma hacia abajo y la muñeca floja. Utiliza la otra mano para presionar el dorso de la mano del brazo dolorido. Dobla la muñeca hacia delante hasta que sientas el estiramiento en la parte exterior del antebrazo. Mantén durante quince segundos. Repetir de tres a cinco veces seguidas, hasta tres veces al día.
4. Fortalece los flexores y extensores de la muñeca
Coge una mancuerna de 500 gramos o, en su defecto, una lata y siéntate. Apoya el antebrazo en el muslo para que la muñeca y la mano no se apoyen en él. Sostén la mancuerna en tu mano, con la palma hacia arriba. Sube la mano lentamente y luego bájala con la misma lentitud. Mantén el antebrazo sobre el muslo durante todo este ejercicio mientras la muñeca se dobla hacia adelante y hacia atrás. Repite diez veces.